Seguros médicos

La declaración 

Recuerdo cuando tuve que hacer mi primera declaración de la renta el primer año que me hice autónomo. Me vi con todo ese manual de Hacienda de más de 1000 páginas y casi me da un patatús. La mayoría de las personas que conocía no tenían problemas con la declaración porque solo tenían que aceptar el borrador y ya está. Pero si eres autónomo hay que hacerlo todo ‘a mano’ lo que conlleva un trabajo considerable. Todos los gastos e ingresos deben aparecer en la declaración, y tampoco hay que perder de vista las deducciones.

Hasta ahora, toco madera, nunca he tenido problemas con la declaración. Pero muchos años me han costado varios días de trabajo porque me han surgido bastantes dudas. Una de ellas, por ejemplo, fue relacionada con la deducción por seguro de salud. Al principio, cuando me di de alta en autónomos, no tenía seguro privado. Ya me parecía mucho tener que pagar la cuota como para encima pagar más por un seguro.

Pero en poco tiempo descubrí que me iba a salir a cuenta Contratar salud autonomos por la comodidad y la seguridad que ello suponía para mí, sobre todo después de tener un par de problemas en la sanidad pública. Pero, además, me enteré de los posibles beneficios fiscales que tiene tener un seguro de salud para autónomos. El problema para mí es que, al principio, me incluí dentro del seguro que mi mujer tiene en su trabajo. Y una de las condiciones que tiene la deducción en la declaración por seguro de salud es que el autónomo debe ser el titular.

 

De esta forma, mientras perteneciera al seguro de mi mujer no me iba a poder deducir nada. Y fue así como empecé a mirar de cara a Contratar salud autónomos. Tuve que hacer bastantes cálculos para ver si me salía a cuenta, pero, finalmente, llegué a la conclusión de que era más beneficioso para mí. Tras varios años, ya puedo decir que soy un experto en hacer la declaración de la renta, aunque, toco madera otra vez, espero no tener problemas con ella este año.